En el pacifico

Pise tierra: morena.

Naufraga y a la deriva simplemente me deje llevar.

Llegue a la isla y calló la tormenta.

Trate de buscarte, de inventarte.

Jugue a adivinar la vida y la historia de personajes extraños de cabello largo y barba entre la selva.

Sonrei.

Encontre miedo al no saber que cuando cae tormenta la mar sigue en calma y la calle no se inunda.

Medite en la noche, me abrace, sali a la oscuridad: paz entre la guerra. A la orilla del mar un soldado veia la telenovela y agarraba su fusil como si fuera la mujer bella a la que acababan de besar.

Corri en el agua, me surmergi y concentre mi atencion en lo que la mar pudiera regalarme.

No aviste ballenas.

Pero ellas me protegieron.



Ya de regreso a mi isla verde, con fuerza.